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CLIMA Y FENóMENOS NATURALES

¿Por qué se nos arrugan los dedos en el agua?

¿Alguna vez te has preguntado por qué se nos arrugan los dedos cuando pasamos mucho tiempo en contacto con el agua?

Aunque pueda parecer una completa ociosidad, los científicos llevan más de cien años preguntándose por qué las manos y los pies se arrugan cuando pasamos mucho tiempo en el agua. El asunto es tan extraño y complicado por varias cuestiones.

Primero, los científicos han notado que solamente ciertas partes del cuerpo se arrugan al pasar más de cinco minutos bajo el agua (en particular, las superficies de los pies y las manos).

Segundo, en los años treinta del siglo pasado, investigadores comprobaron que si se cercenan ciertas conexiones nerviosas los dedos dejan de arrugarse. Esto quiere decir que es un reflejo relacionado con el sistema nervioso central y no es una simple reacción química o de osmosis.

(Flikr / CC)

Estos dos elementos han brindado ciertas pistas a los científicos para especular sobre este misterioso fenómeno.

Al parecer, una de las principales teorías es que los dedos se arrugan por una cuestión evolutiva. Porque, al parecer, los únicos animales con una reacción de este tipo son los primates -en particular los macacos y los humanos-.

Pero, ¿por qué sería esto una forma de protección evolutiva?

Los científicos especulan que las arrugas en dedos y pies pueden haber sido un rastro evolutivo para evitar resbalones. Así como se escucha. El asunto es que con los dedos arrugados tenemos un mucho mejor agarre en condiciones resbalosas de humedad y lluvia.

(Wikimedia Commons)

¿Has visto como las llantas de los coches de carrera son completamente lisas y las de los otros coches tienen relieve?

Bueno, pues es el mismo principio: las llantas de los coches de carrera están hechas para una superficie lisa y seca y para evitar la fricción con el pavimento, mientras que las de los demás coches deben tener mayor agarre para evitar accidentes en condiciones de lluvia y humedad.

También ha habido especulaciones en torno a otra teoría que compara las arrugas de los dedos con las cuencas de los ríos. Los ríos son un sistema natural de canalizar el agua desde las zonas altas del mundo hacia el mar. De la misma manera, estas arrugas pueden servir para canalizar el agua al agarrar una superficie. Así, el agua se escurre y permite tener un mejor agarre.

En cualquier caso, las dos teorías apuntan a que es una cuestión de tracción que debió añadirse a nuestra genética para sobrevivir en ciertas condiciones, agarrados a las rocas y a los árboles.

Así que ya sabes, cuando las manos se te hacen como pasa es tu cuerpo recordando aquellos tiempos en que vivíamos trepados a los árboles con miedo a los depredadores de la tundra.

(Wikimedia Commons)