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ENTRETENIMIENTO Y ESPECTáCULOS

Video: El gorila que se hizo viral no estaba bailando (pero hay animales que sí bailan)

Este gorila fue toda una sensación en Youtube la semana pasada cuando un video del zoológico de Dallas mostró un clip en donde está, aparentemente, bailando en su bañera.

Sin duda que Zola, como se llama el gorila de 14 años, disfruta del agua. Sin embargo, en realidad, no está bailando, porque el humano es el único primate que sabe bailar.

El baile es una secuencia de movimientos sincronizados a la par de un ritmo definido. El ritual y manoteos que Zola realiza en realidad, deberían ser catalogados como juegos ya que, en el momento de la grabación, no había música involucrada.

A continuación, exponemos otro ejemplo en dónde otro gorila, recrea estos juegos en su celda en el zoológico de Calgary aunque, en este caso, el internet se encargó de sobreponer música en el metraje:

Esta conclusión viene de un estudio realizado en 2007 por el científico Aniruddh Patel quién, se dio a la tarea de averiguar si los animales, más en específico la cacatúa Snowball, era capaz de seguir el ritmo de la música y bailar. 

Por supuesto, hay cientos de especies de animales capaces de seguir un ritmo: osos, perros, gatos, mofetas, loros y ahora incluso tenemos gorilas, para constatarlo hay miles de videos de animales andando graciosamente o moviendo la cabeza al compás de una canción pero eso no es bailar. Al menos no como lo definen los científicos.

Según dice el neurobiólogo Aniruddh Patel en el mismo estudio:

Bailar, es una respuesta espontánea donde el animal se mueve sobre el ritmo, jugando con la música. El animal no puede entrenarse. No puede tener a un humano en la habitación para copiarlo. No puede pasar semanas expuesto a la misma melodía. Y cuando la música cambia, tiene que cambiar con ella, apegarse al ritmo. La “danza” es desencadenada por el sonido, pero los movimientos vienen desde el interior, desde circuitos profundos en el cerebro del bailarín.”

Patel quiso saber si había otros animales capaces de bailar. Para eso, puso a una cacatúa a bailar. Al ver que seguía el ritmo de una canción utilizó un programa para crear 11 versiones diferentes de la misma (el tema de los Backstreet Boys “Move Your Body“), que, al parecer, era el tema favorito del ave. Todas las versiones contaban con el mismo pitch, pero tenían ritmos diferentes, desde un 20% más lenta a un 20% más rápida que la original. Snowball bailó todas y cada una de estas ediciones, aunque a veces con problemas para seguir el ritmo.

La cacatúa se había convertido en primer “bailarín” no humano validado por la ciencia. Mantener el ritmo más de un 25% del tiempo no era pura casualidad o un evento al azar. A partir de entonces, Patel y otros científicos como la psicóloga de Harvard, Adena Schachner, comenzaron a realizar investigaciones en otras especies.

Schachner recopiló más de 5 mil videoclips en YouTube de todo tipo de animales, todos bailando supuestamente.

Los resultados, después de la eliminación de animales moviéndose sin música y especímenes entrenados para bailar, concluyó con 39 ejemplos de bailarines animales. 20 de ellos eran loros lo cual muestra que estas aves tienen una tendencia a seguir un ritmo definido en la música. El resto de los animales bailarines eran elefantes asiáticos.

A pesar de que los resultados fueron sacados a partir de muchos tipos de animales diferentes, los resultados de los experimentos no son exhaustivos. Sólo cabe esperar el resultado de más pruebas para estar seguros.

Con información de NPR.