Incendio forestal descubre mensaje oculto por 70 años. Era una forma de evitar que los alemanes bombardearan Irlanda en la Segunda Guerra Mundial.
Las altas temperaturas que se han registrado en algunas partes de Irlanda, al oeste de Inglaterra, provocaron un incendio forestal que dejó al descubierto un mensaje que había permanecido oculto desde la década de los cuarenta.
Se trata de un gran mensaje hecho con piedras recubiertas de cal, en el que se lee el término “Eire“, que en la lengua originaria de la isla, significa “Irlanda”.
El mensaje había sido hecho para evitar que los pilotos alemanes o Aliados bombardearan este país debido a su cercanía con el Reino Unido (Irlanda del Norte, Gales, Escocia e Inglaterra), uno de los principales objetivos de la Fuerza Aérea de la Alemania Nazi, la Luftwaffe.
Debido a que Irlanda fue un país neutral durante la Segunda Guerra Mundial, el gobierno pagó grandes cantidades de dinero para colocar mensajes como el recién descubierto a lo largo de la costa irlandesa, con el fin de asegurarse de que ninguna bomba cayera dentro de su territorio.
El mensaje estaba hecho con piedras recubiertas de cal (Irish Air Corps).
Al final del conflicto, la mayoría de los mensajes fue borrado, menos uno, el que un incendio forestal descubrió recientemente.
Al parecer, dicen medios locales, el mensaje hecho con piedras pintadas con cal para hacerlas visibles por la noche, quedó olvidado debido a que la maleza lo había ocultado completamente, y así permaneció más de 70 años.
Se calcula que en 1944, se reunieron más de 150 toneladas de piedras para escribir 83 mensajes en los que podía leerse desde el aire, el término “EIRE” junto a un número que designaba el destacamento que debía cuidar esa señal en particular.
Durante los días de la guerra, una persona visitaba el mensaje que le correspondía cuidar, para asegurarse que nadie había retirado piedras para deshacerlo o si hacía falta volver a recubrirlo de blanco.
Google Maps
En internet hay un mapa que deja ver exactamente dónde estaban los mensajes que se habían colocado para evitar sufrir un destino similar al de algunas de las principales ciudades inglesas durante el conflicto global contra Japón, Alemania e Italia.
