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SALUD

¿Qué es el trastorno bipolar, la enfermedad que padecía Dolores O’Riordan de The Cranberries?

Mientras el mundo lamenta la muerte de Dolores O’Riordan y la recuerda con las mejores canciones que compuso con los Cranberries, aún se desconocen las causas oficiales de su fallecimiento a los 46 años de edad.

Lo que sí se conoce es el historial de problemas de salud de la cantante, particularmente en los últimos años. A finales de 2014, en un vuelo de Nueva York a Irlanda, la artista se comportó de manera agresiva con la tripulación, lo que provocó que fuera echada del vuelo.

Al momento de su arresto en el aeropuerto, O’Riordan se resistió a ser detenida, atacó a uno de los policías con un cabezazo y le escupió a otro. Se reporta que también gritó “Soy la reina de Limerick. Soy un icono.”

A causa de este incidente, la cantante se sometió a una revisión psicológica en la que se le diagnosticó trastorno bipolar. Al poder demostrar que estaba enferma al momento del viaje, la Cranberry pudo evitar una condena penitenciaria. Al final solo tuvo que pagar una multa y emitir una disculpa pública a los afectados.

Al salir de la corte en febrero de 2016, O’Riordan agradeció el apoyo de los médicos y su familia, y alentó a sus fans a buscar atención médica si temen que padecen alguna enfermedad mental.

El trastorno de O’Riordan no se manifestó de la noche a la mañana. En una entrevista publicada en mayo de 2017, la cantante admitió que por varios años había tenido que lidiar con los síntomas:

Hay dos extremos del espectro: puedes ponerte extremadamente deprimida y triste y perder interés en las cosas que te gusta hacer, y luego puedes volverte súper maníaca. Estuve en el lado hipomaníaco del espectro de manera intermitente durante un período prolongado, pero en general solo puede durar hasta tres meses antes de tocar fondo y caer en la depresión. Cuando eres maníaco no duermes y te vuelves muy paranoico.

O’Riordan tampoco es la única artista que ha padecido trastorno bipolar o depresión severa. Entre sus contemporáneos, el caso más conocido es la de su paisana, Sinéad O’Connor. En no pocas ocasiones, la cantante ha amenazado con quitarse la vida y ha publicado videos en los que sufre los síntomas de su condición.

Otros artistas que fueron diagnosticados con trastorno bipolar: Carrie Fisher, Lily Allen, Kurt Cobain, Scott Weiland, Francis Ford Copolla, Catherine Zeta-Jones, Ernest Hemingway.

¿Pero qué es el trastorno bipolar y por qué debe abordarse con mucha seriedad?

Seguro has escuchado en ocasiones que alguien dice en broma que tú o un amigo “anda bipolar” por un repentino cambio de comportamiento. A cualquiera le puede pasar. Un momento estás contento o alegre pero ocurre algo que cause que pierdas los estribos. Por ejemplo, vas manejando y de repente alguien se te cierra y casi provoca un accidente. Por supuesto que vas a estar enojado.

Pero en estas situaciones, hay una causa que explica el cambio repentino de ánimo. Cuando se trata de una persona que padece trastorno bipolar, no hay una causa justificable que detone el cambio de ánimo, y estos estados son mucho más pronunciados y graves que una furia pasajera. Del 1 al 3% de la población mundial padecen los síntomas de esta condición.

El trastorno bipolar es una enfermedad que nos obliga a percibir la realidad a través del prisma de dos estados de ánimo extremadamente distintos. Por un lado están los episodios maníacos, en los que nos sentimos inundados por sensaciones como exceso de confianza, pérdida de inhibición, hipersensibilidad, excitación, aparte de una aceleración de ideas creativas, entre otros síntomas.

Del otro lado de estos delirios de grandeza están los periodos de depresión, los cuales se manifiestan de diversas maneras: pérdida de interés en hobbies, carencia de sueño, fatiga constante, falta de autoestima, inclinación por el autosabotaje, y lo que es más preocupante, pensamientos negativos que en casos extremos consideran el suicidio.

El trastorno bipolar es una condición mental que se puede tratar con una combinación de sesiones de terapia y medicamentos que buscan estabilizar tu estado de ánimo. Los fármacos empleados incluyen eutimizantes como litio, valproato o lamotrigina, en combinación con algún neuroléptico como aripiprazol o quetiapina.

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