Anthony Allen Shore, también conocido como ‘el asesino del torniquete’, será ejecutado esta tarde, 18 de octubre, en una prisión de Texas por inyección letal.
De 55 años de edad, Shore fue condenado a muerte en 2004, cuando confesó haber violado y asesinado a Maria del Carmen Estrada, una mujer hispana. Estrada tenía 21 años de edad cuando Shore le puso fin a su vida en 1992.
Aunque la sentencia solo estuvo vinculada a este caso, el asesino serial también confesó haber matado a otras tres mujeres en Houston, entre 1986 y 1995. El mismo acusado sugirió la pena de muerte como su castigo y pidió ser interrogado por la fiscalía de tal manera que tuvieran justificación de dictar dicha sentencia.
Anthony todavía cree… que es hora de que sacrifique su vida por lo que ha hecho.
Dijo su abogado a la corte hace 13 años. No obstante, los nuevos abogados de Shore hicieron lo posible por evadir la pena capital hasta el último momento. La defensa argumentó que su cliente padecía daño cerebral, por lo que no debería ser ejecutado, pero la corte de apelaciones se negó a modificar la sentencia.
De acuerdo al veredicto de los jueces, Shore cuenta con un largo historial de comportamiento violento y actos de abuso sexual cometidos contra mujeres y menores de edad, incluyendo sus propias hijas:
Las hijas de Shore declararon que fueron acosadas, drogadas y agredidas sexualmente por Shore. Su esposa y sus ex novias declararon que las drogó y violó, las estrangulaba mientras tenían relaciones sexuales, usaba drogas y guardaba pornografía de niñas.
Encima de todo esto, la hermana Shore también rindió su declaración y dijo que él apuñaló a un gato cuando tenía 4 o 5 años, una vez casi la mata con un desarmador, y que a menudo la usaba para invitar a otras chicas a salir de sus casas para que así él pudiera acosarlas y besarlas.
De acuerdo a una declaración del director de un programa de agresores sexuales, el acusado siempre ha estado al tanto de sus actos y que incluso cuenta con un intelecto superior. El director lo describió como narcisista, manipulativo, oportunista, psicópata, y consciente de lo que es socialmente aceptable, pero que estaría dispuesto a violar la ley, si eso implicaba satisfacer sus anhelos sexuales.
Anthony Allen Shore se quedó con el mote de ‘el asesino del torniquete’ porque usaba una cuerda para estrangular a sus víctimas, cortando la circulación del aire como si fuera un torniquete.
Via NBC News.
