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FAMILIA

Conoce la “Sologamia”: la nueva tendencia de casarse consigo mismo

Laura Mesi le dijo a sus amigos y a su familia que si no encontraba a su “alma gemela” antes de cumplir 40 años, se iba a casar consigo misma. ¡Y lo hizo!

Esta mujer italiana se tomó la molestia de montar la típica recepción de una boda: se puso el traje de novia, invitó a 70 personas, obtuvo el pastel y el champagne y contrató a un fotógrafo profesional, entre otros detalles nupciales… y todo para ella sola.

Creo firmemente que cada uno de nosotros debe amarse a sí mismo antes que nada. Puedes tener un cuento de hadas incluso sin el príncipe.

Palabras de la orgullosa novia a un medio local (via BBC).

Aunque la ceremonia no tiene ningún peso ante la ley, la increíble acción de Laura Mesi forma parte de una tendencia etiquetada como “sologamia”. Ella es la primera mujer en casarse con sí misma en Italia, pero no es la primera persona. Un hombre de Nápoles se casó consigo mismo en mayo.

Con el creciente número de solteros (principalmente en países desarrollados), la idea de una boda con uno mismo no es totalmente original. En Japón hay una agencia de viajes que ofrece ceremonias para solteras desde 2014. En EE.UU. y Canadá hay páginas que ofrecen paquetes para este tipo peculiar de bodas. La sologamia también ha sido fuente de inspiración para la literatura y la televisión.

¿Pero no es una decisión algo extrema gastar tanto tiempo y dinero en un festejo rimbombante solo para quedarse con un gesto simbólico?

Mesi acepta que ceremonias de este tipo no son para todos. Para tales eventos se requiere dinero, el apoyo de tu círculo social y “una pizca de locura”.

En efecto, la “recién casada” ha sido tachada de “loca” y “feminista triste” en redes sociales, pero ella afirma que no hay comentario que pueda amargar su felicidad actual. A Mesi se le ocurrió la idea de casarse consigo misma hace dos años, luego de dar por terminada una relación de doce años.

Nada es seguro en el terreno de las relaciones, pero uno puede buscar consuelo en los rituales que prometen estabilidad y felicidad, aunque sean cosas efímeras.