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ENTRETENIMIENTO Y ESPECTáCULOS

Bohemian Rhapsody: ¿Quién es Mary Austin, el primer amor de Freddie Mercury?

Su talento inagotable, su voz extraordinaria, sus leotardos ajustados, su poblado bigote, su estilo exuberante y sus relaciones homosexuales son algunas de las cosas más recordadas de Freddie Mercury.

Pero pocos saben acerca de Mary Austin, una mujer que llegaría a ser el gran amor del músico, con la cual viviría durante seis años, a quien heredaría su mansión y una fortuna de más de 54 millones de euros.

Mary Austin conoció a Freddie Mercury antes de que alcanzara la fama como líder de Queen, la banda cuya historia y canciones han vuelto a resonar tras el reciente estreno de la película “Bohemian Rhapsody”.

Austin estuvo al lado de Mercury hasta sus últimos días, cuando falleció a los 45 años como consecuencia directa de una neumonía bronquial, provocada por el SIDA.

De hecho, Austin es la única que sabe dónde están las cenizas del cantante, escondidas a pedido de este para evitar grandes congregaciones de fans e intromisiones.

Mary Austin y Freddie Mercury en una fiesta organizada en su casa en 1977 (GettyImages Archivo)

 

Austin era hija de una familia del sur de Londres. Su padre trabajaba en una tienda de empapelados, mientras que su madre era una empleada doméstica. Austin conoció a Freddie Mercury cuando trabajaba en una tienda de ropa de moda en Londres llamada Biba.

Farrock Bulsara, nombre natal de Mercury, recién se había graduado en la carrera de Arte y Diseño Gráfico, y estaba dando sus primeros pasos hacia formar la banda que más tarde se convertiría en Queen.

Pocos meses después del encuentro, Austin y Mercury comenzaron a vivir juntos en un departamento en el lujoso barrio de Kensington y, en 1973, Mercury le pidió matrimonio, a lo que dijo “sí”.

Sin embargo,la boda nunca llegó a materializarse.

La revelación de Mercury

A medida que crecía la carrera de la banda, Mercury pasaba cada vez más tiempo fuera de la casa y la pareja empezó a distanciarse.

Durante una de sus discusiones, el cantante le confesó a Mary Austin que era homosexual.

Si bien la relación física entre ambos cesó a partir de ese momento, la relación de amor y amistad continuó su curso.

Mercury se las ingenió para tener a Austin siempre cerca. Adquirió un departamento a poca distancia de su casa para que pudieran verse a través de la ventana y le encontró un rol administrativo y asistente personal dentro de la banda.

Aunque Austin más tarde se casó con otro hombre y tuvo dos hijos, nunca dejó de estar fuertemente involucrada en la vida de Freddie Mercury.

Ella también fue la primera a quien el cantante le confesó que tenía SIDA.

Freddie Mercury, con su amiga (y posterior heredera) Mary Austin, en el Royal Albert Hall de London en noviembre de 1985 (GettyImages Archivo)

 

La herencia

El testamento del líder de Queen revela el agradecimiento y devoción que aún sentía por Mary Austin.

Mercury le dejó la mitad de su fortuna, incluyendo su lujosa mansión de 28 habitaciones de Garden Lodge en Kensington, así como futuras ganancias por derecho de autor. Estas ganancias representan incluso más que lo que dejó a su última pareja, Jim Hutton, con quien estuvo hasta su muerte, el 24 de noviembre de 1991.

Hoy, a sus 67 años, Austin continúa viviendo en la mansión donde vivió y falleció el cantante, la cual se ha convertido en un lugar de peregrinación para sus admiradores.

De acuerdo con declaraciones que dio un vecino al tabloide británico The Sun, Austin sale poco de su casa y no habla con muchas personas.

En los últimos años la he visto dos veces. Viaja en su viejo Mercedes y no habla con nadie”, dijo el vecino.

Con información de BBCMundo