Esta semana las calles de Venezuela se volvieron a llenar de protestas masivas en contra y en favor del gobierno de Maduro, pero ¿por qué se ha elevado nuevamente la tensión en el país sudamericano?, ¿qué está sucediendo y por qué hay países latinoamericanos presionando a este país (incluido México)?
Un pequeño recuento de los daños
El 19 de abril miles de ciudadanos que apoyan a la oposición y ciudadanos que apoyan el régimen de Maduro salieron a las calles, lo que se tradujo en enfrentamientos y represión que terminó con la muerte de 3 personas.
Según la organización Foro Penal Venezolano, más de 100 mil salieron a las calles, de los que 521 fueron detenidos y por lo menos 57 resultaron heridos.
REUTERS/Christian Veron
Por otro lado, el jueves 20 de abril murieron 8 personas electrocutadas al intentar asaltar una panadería en el marco de los disturbios que se han generado debido a las protestas.
Ese mismo día la General Motors anunció la suspensión de sus operaciones en ese país. Además, Movistar fue acusada por el presidente Maduro de sumarse a la convocatoria golpista contra el país por lo que ordenó una investigación.
Hasta ahora van más de una decena de muertos, actos de pillaje y actos de contención por parte del Ejército y la Policía venezolanos que han actuado equipados con bombas lacrimógenas y equipo antimotines.
REUTERS/Carlos Garcia Rawlins
La madrugada del viernes 21 de mayo un hospital con 54 niños internados fue evacuado tras ser afectado por los disturbios. La ministra de Exteriores, Delcy Rodríguez, responsabilizó del ataque a las “bandas armadas contratadas por la oposición”. Sin embargo, los líderes de la oposición lo negaron y denunciaron la represión policial.
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Ese mismo viernes fue convocada una nueva serie de movilizaciones, esta vez, en recuerdo de las personas fallecidas.
La responsabilidad de las muertes ha sido una moneda de cambio que han tratado de capitalizar ambos bandos. Por un lado, la oposición acusa a la policía de haber provocado dichas muertes, por otro lado, el gobierno ha señalado que fueron grupos de la oposición quienes provocaron la violencia.
Joven desnudo se enfrenta a Policía venezolana REUTERS/Carlos Garcia RawlinsTEMPLATE OUT
¿Qué disparó esta nueva crisis política?
El ambiente político en Venezuela es delicado debido a que el Gobierno tuvo que dar marcha atrás con dos sentencias del Tribunal Superior de Venezuela que le daban facultades especiales al presidente Maduro y le quitaban las suyas al Poder Legislativo del país depositado en la Asamblea Nacional (controlada por la oposición).
La Asamblea Nacional había estado intentado hacer una referendum e intentar convocar a elecciones, esto fue impedido por el Poder Judicial de ese país.
Después el Poder Judicial (depositado en el Tribunal Superior) intentó mediante dos sentencias suspender facultades del Poder Legislativo y dárselas al Ejecutivo (depositado en la figura del presidente).
REUTERS/Carlos Eduardo Ramirez
Incluso el pasado 31 de marzo, la fiscal general del Estado, Luisa Ortega (chavista), se opuso en público a ambas sentencias.
Ahora Maduro intenta llevar a cabo elecciones regionales para alcaldes, pero el clima político se ha visto viciado desde el intento de sabotear al Poder Legislativo.
Todo esto ha terminado con la oposición convocando protestas y el Gobierno convocando a manifestaciones de apoyo (incluido un despliegue del apoyo por parte del ejército venezolano).
¿Qué están haciendo México y otros países de América Latina?
El 20 de abril un grupo de nueve países latinoamericanos condenó la violencia que ha sido desencadenada en Venezuela y lamentó la pérdida de vidas.
Los países firmantes son los gobiernos de México, Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Paraguay, Perú y Uruguay. Estos países urgieron a Venezuela a fijar las fechas para las elecciones, libere los presos políticos y garantice la separación de poderes.
No es la primera vez que México y otros países latinoamericanos se unen con el objetivo de presionar al gobierno venezolano para negociar con la oposición. Ya se había suscitado un enfrentamiento entre diplomáticos mexicanos y venezolanos en una reunión en la Organización de Estados Americanos (OEA) hace tan solo unas semanas.
En ese momento, 14 países, incluido México, pedían a Venezuela reconocer la legitimidad de las decisiones de la Asamblea Nacional, la liberación de presos políticos y que se organizaran elecciones.
Ahora 9 países firmaron el siguiente documento:
Los Gobiernos de la Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, México, Paraguay, Perú y Uruguay, condenamos enérgicamente la violencia que ha sido desencadenada en Venezuela y lamentamos asimismo que no se hayan atendido las exhortaciones de la comunidad internacional para que las manifestaciones anunciadas en ese país transcurrieran en un clima pacífico y sin violencias.
Nos sumamos a la declaración formulada hoy por el Secretario General de las Naciones Unidas urgiendo a “la adopción de medidas concretas de todas las partes para reducir la polarización y crear las condiciones necesarias para enfrentar los desafíos del país en beneficio del pueblo venezolano”.
Reafirmamos que es urgente que las autoridades venezolanas adopten medidas para asegurar los derechos fundamentales y preservar la paz social.
Resulta imperativo que la hermana República Bolivariana de Venezuela retome la senda de la institucionalidad democrática y que su Gobierno fije las fechas para el cumplimiento del cronograma electoral, libere los presos políticos y garantice la separación de poderes constitucionales.
Después de los enfrentamientos diplomáticos, México ha descartado llamar a consulta a su embajador en Venezuela. De hecho, el secretario de Relaciones Exteriores mexicano, Luis Videgaray, ha anunciado que es necesario que el embajador de México se quede en el país para asistir y proteger a los mexicanos residentes en el país sudamericano, además de que es necesario mantener un vínculo diplomático con el régimen de Nicolás Maduro.
Por otro lado, el presidente Peña Nieto se reunió con Lilian Tintori, esposa de uno de los líderes de la oposición que permanece preso: Leopoldo López.
Sobre el enfrentamiento entre diplomáticos, el vicepresidente de Venezuela llamó a México hipócrita:
Imaginen ustedes, el canciller de México (sic), donde todos los días encuentran un cementerio clandestino, donde asesinan a maestros, a los estudiantes los desaparecen (…) ¿Y están preocupados por Venezuela? Falsos, hipócritas.
Además de los países latinoamericanos y la OEA, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, expresó su preocupación ante lo que sucede en Venezuela. Sugirió, también, que los temas primordiales para resolver las tensiones es el restablecimiento del equilibrio entre los poderes, el calendario electoral, los derechos humanos y la situación económica venezolana.
Con tanta presión a nivel internacional y la presión interna por parte de la oposición, ¿cuál será la reacción del régimen de Maduro?, ¿se prestará a la negociación o se volverá aún más cerrado?
