Japón, un país de vírgenes y viejos

CIUDAD DE MÉXICO, México, sept. 20, 2016.- La población joven de Japón se ha convertido en una preocupación para el gobierno, porque se niegan a formar familias y alistar el reemplazo poblacional que le dé soporte a la economía.

El Instituto Nacional de Población nipón realizó una encuesta a personas entre 18 y 34 años de edad que arrojó resultados que sorprenderían en cualquier otro lugar del mundo.

El estudio encontró que 70 por ciento de los varones y 60 por ciento de las mujeres en esta brecha no se han casado, ni tienen relación de pareja. Además, 42% de los hombres y 44.2% de las mujeres admiten nunca haber sostenido un encuentro sexual.

Esta cifra sobrepasa el resultado de 2010, cuando 36.2% de los hombres y 38.7% de las mujeres entre 18 y 34 años aceptaron ser vírgenes.

El gobierno de Shinzo Abe ha advertido en varias ocasiones que la tasa de natalidad debe aumentar o los sistemas de pensiones en el país más envejecido del mundo terminarán por colapsar.

Es que, en el extremo contrario el número de ciudadanos japoneses de más de 65 años de edad crece y se sitúa en la cifra récord de 34,6 millones, un 27.3 por ciento de la población nipona, según las cifras oficiales publicadas hoy con motivo del Día Nacional de los Ancianos.

Esta cifra supone un aumento de 730,000 personas de la tercera edad (0.6 por ciento) respecto a 2015 en el país asiático, según los datos anuales divulgados por el Ministerio del Interior y Comunicaciones y correspondientes al 15 de septiembre.

En el caso de las mujeres, las mayores de 65 años alcanzan el 30 por ciento por primera vez, con un total de 19.62 millones, mientras que los hombres de esa franja de edad son 14.9 millones, un 24.3 por ciento de la población masculina de Japón.

La alta tasa de población anciana supone un desafío para la tercera economía mundial, y en particular para la sostenibilidad de sus servicios sanitarios y de su sistema de pensiones.

El Instituto Nacional de Población y Seguridad Social de Japón calcula que alrededor de 36% de sus ciudadanos serán mayores de 65 años para el año 2040.

En ese sentido, según las cifras de 2015, un total de 7.3 millones de japoneses mayores de 65 años seguían trabajando, lo que supone un incremento continuado desde hace 12 años.

Japón batió además este año su récord de ciudadanos centenarios con 65,692 registrados en el censo, de los que 87.6 por ciento son mujeres.

En este contexto, el gobierno se enfrenta a la encrucijada de abrir la puerta a la migración para que haya gente joven que trabaje en el archipiélago, un tema que resulta espinoso pues muchos sectores de la población rechazan la opción.

(Con información de Efe y Reuters)

tfo