Libra esterlina se recupera de mínimos; escalada del yen hace pausa

LONDRES, Inglaterra, jun. 28, 2016.- Las monedas de riesgo y con fuertes retornos como el dólar australiano subían en línea con la libra esterlina, en momentos en que los inversionistas hacían una pausa tras una fuerte ola vendedora alentada por la decisión de Reino Unido de abandonar la Unión Europea la semana pasada.

Las monedas de refugio como el yen y el franco suizo, que han escalado con fuerza desde el referendo británico del jueves, operaban a la baja, aunque la confianza en el riesgo era frágil.

Las agencias de calificación Standard & Poor’s y Fitch han rebajado la nota de la deuda de Reino Unido, lo que se ha sumado al sombrío panorama para la moneda británica.

La atención de los inversores estaba en la celebración de la primera cumbre de la UE desde el referendo, a la que asistirá el primer ministro británico David Cameron, aunque será excluido del segundo día de negociaciones en momentos en que otros 27 líderes discuten los efectos colaterales del "Brexit".

Analistas dijeron que el tono de la cumbre daría una idea de cuán difíciles serán las negociaciones con Reino Unido una vez que sea activado el artículo 50 del Tratado de Lisboa, que regula el proceso de salida de un país del bloque. Hasta ahora Reino Unido no ha tenido apuro en hacerlo, lo que ha impulsado a la libra.

La libra subía 1 por ciento, a 1.3373 dólares, al recuperarse de mínimos de 31 años de 1.3122 dólares vistos el lunes. El descenso de la libra el viernes y el lunes fue el mayor desde la era del tipo de cambio flexible después de 1973 y se produjo en momentos en que los bancos británicos perdieron un tercio de su valor en dos días.

El euro subía a 1.1093 dólares, al repuntar de mínimos de tres meses el viernes de 1.0912 dólares. La moneda única ha sido presionada debido a que el "Brexit" ensombrece el futuro de todo el bloque.

Frente al yen, el dólar subía a 102.33 yenes. El viernes, la moneda japonesa cayó a 99 yenes por dólar, su menor nivel desde fines del 2013, cuando se hizo evidente que los británicos habían optado por dejar de pertenecer a la UE.

tfo